Michal y Petr, dos hermanos fundadores del taller checo Benlemi, crean muebles que se convierten en compañeros de juego. Su filosofía rechaza los muebles estáticos contra la pared para privilegiar creaciones que estimulan naturalmente la personalidad y el espíritu juguetón de los niños. Una visión donde cada cama cabaña invita a explorar e imaginar.
Desde 2015, esta tradición checa de excelencia combina el saber hacer artesanal y materiales naturales nobles. La madera maciza, trabajada con cuidado en carpintería, garantiza piezas pensadas para atravesar generaciones. Un equipo de 30 artesanos vela para que cada acabado respete los estándares de seguridad y durabilidad más exigentes.
Más allá de la fabricación, su compromiso social y ambiental refleja una responsabilidad asumida. Más de 30 000 familias europeas confían en estas creaciones donde el juego libre, el desarrollo motor y la calidad premium se unen para ofrecer a los niños espacios propicios para su desarrollo.
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